ENTREVISTA A XULIÁN SUÁREZ FLÓREZ, PREMIO FIN DE GRADO 2016 EN LA ESPECIALIDAD DE CLARINETE

Xulián durante el recital previo a la entrega de Premios. (Fotografía de José Suárez)

P.- ¿Cómo y cuándo te iniciaste en el mundo de la música?
R.- Con la música en general empecé muy pronto, a los seis años, y con el clarinete en particular comencé a los ocho o nueve en la Escuela de Música de Mieres, con Roberto Serrano.

P.- ¿Conocías a algún músico en tu círculo familiar o de amigos?
R.- Mi madre estaba en un grupo de recogida de música tradicional, L´aniciu, en el que tocaba la pandereta. Y aunque no había músicos clásicos en mi entorno, en mi casa se escuchaba mucha música clásica. Antes de que yo naciese, mi madre había comprado una colección de Salvat que tenía muchísimos discos con repertorio clásico y recuerdo cómo haberlos escuchado cuando era niño.

P.- ¿Por qué escogiste tu instrumento?
R.- Pues en principio yo quería tocar la trompeta, pero mis padres conocían mucho a Roberto Serrano, profesor de clarinete en la Escuela de Música de Mieres, tenían muy buena relación con él y supongo que, en parte por eso y en parte para evitar el gran volumen sonoro de la trompeta, me animaron a decantarme por el clarinete y la verdad es que me convencieron fácilmente. Creo que fue buena elección, además el clarinete es un instrumento muy agradecido para empezar, que permite obtener un sonido decente casi desde los primeros contactos con él.

P.- ¿Cómo describirías tu experiencia en el conservatorio de Oviedo?
R.- Positiva, especialmente al ir madurando e ir descubriendo que la música me gustaba cada vez más, hasta decidir que quería dedicarme más a fondo a ello.

P.- ¿Cuándo supiste que te ibas a dedicar a la música?
R.- Estaba haciendo primer curso de Bachiller por la rama de Sociales cuando lo vi claro y pensé que la música es lo mío.

P.- ¿Recomendarías a niños y jóvenes que aprendiesen a tocar un instrumento musical?
R.- Sí, totalmente. Para mi la música es lo más. Incluso diría que el instrumento no importa, pero la esencia de la música… Es un arte muy especial, porque tiene una base científica, armónica, que requiere de mucho conocimiento y raciocinio para ser entendida, y sin embargo todo el mundo puede escuchar la música y disfrutarla.

P.- ¿Qué características distintivas crees que hacen único a tu instrumento?
R.- Creo que el clarinete es un instrumento con muchas posibilidades, por su agilidad, su extensión… y el contraste que hay entre su registro agudo y el grave del chalumeau es incomparable.

Xulián acompañado al piano por Álvaro Rodríguez. (Fotografía de José Suárez)

P.- ¿Tienes algún intérprete favorito?
R.- Me gustan José Franch-Ballester y Alessandro Carbonare

P.- ¿Y algún compositor favorito?
R.- En general, me gusta casi todo. Escucho música muy variada. Me gusta mucho Stravinsky, y en realidad casi todos los compositores, ¿cuál no?

P.- ¿Qué música te gusta escuchar?
R.- De todo: escucho mucha clásica, rock clásico, The Beatles, música folk…

P.-¿Piensas continuar tus estudios musicales?
R.- Estoy en ello. Curso primero de Enseñanzas Profesionales de Piano y continúo los estudios superiores de Clarinete.

P.- ¿Cómo te ves dentro de diez años?
R.- Siendo muy optimista, con un trabajo estable en algo relacionado con la música. Enseñar me gusta, pero creo que me gustaría más tocar en orquesta, es una experiencia que ya como estudiante se intuye. Me gustaría saber lo que es ser integrante de una orquesta profesional, que suene como las grandes orquestas que escuchamos en los discos o en los auditorios.

P.- Si no hubieses sido músico, ¿qué te habría gustado ser?
R.- Me gustaba mucho la biología, luego en el Bachiller también me llamaba la atención el periodismo…

P.- ¿Crees que la música “clásica” es algo que sólo algunos pueden entender?
R.- Creo que todo el mundo puede escucharla y disfrutarla, pero también que el tener formación musical específica ayuda a entenderla mejor y creo que a sentirla como algo propio: al final uno acaba midiendo hasta el compás de las campanas de la iglesia (risas) .
P.- ¿Has hecho amigos aquí?
R.- El noventa por ciento de mis amigos son del conservatorio.

P.- Por último, ¿te gustaría dedicar este premio a alguien?
R.- Pues a mis padres, a todos los profesores que tuve y que de una u otra manera hicieron que me llegase a decantar por la música, especialmente a Fernando Ñíguez, y a mis vecinos por no quejarse nunca.


(Entrevista concedida el 25 de Noviembre de 2016)